A menudo nos solemos tomar el sexo como algo tremendamente serio, le damos la importancia social, cultural, o religioso que hemos heredado.
Y, francamente, resulta mucho más placentero cuando se plantea como un simple juego.
Sin perder de vista las elementales medidas contra las ITS´s, la risa provoca, a la hora de jugar a juegos de mayores, una mejor sintonía con nuestra pareja.
Todos podéis encontrar en Internet, la relación entre las hormonas que se segregan al reír, el bienestar que sentimos, la relajación de los músculos y bla bla bla…
Pero,seamos más sensitivos. No me digáis que, nunca habéis sentido que, con una pareja, ocasional o estable, hay un sexo mejor y de más calidad si podéis reiros a carcajadas que, con una persona a la que le cuesta entender una ironía, una broma y a la que le cueste la misma vida sonreír. Y cuando lo hace, le sienta tan bien a la cara como a Margareth Tatcher…¡Pues eso mismo!
Si eso sucede entre parejas, en el scorting es absolutamente imprescindible.
El buen humor, el distendimiento, las ganas de pasarlo bien, no tener miedo a gastar una broma, ni a encajarla, resultan indispensables, porque, si hay un acto humano, muy íntimo y compartido, ése es el sexo.
Sexo y risas son necesarios, cuanto más, en esta profesión.
En citas largas, como las que implican viajes, es otro cantar. Otro día lo comentamos.
Pero en lo que se refiere a citas cortas, de una, dos horas, en las que impera básicamente el sexo y donde no valen cortejos, mimos, flores, cenas, veladas encantadoras, conciertos, paseos…hay que conectar. Y si bien, siempre se intenta por ambas partes, desde la primera conversación telefónica, que haya un buen entente, la presencia física, el dar la cara, resulta, afortunadamente ocurre pocas veces, complicado.
Hay personas que por teléfono dan una imagen que, se va al traste en cuanto hay que hacer acto de presencia. Una sonrisa, una mirada, van a ser las bases sobre las que van a sostenerse los próximos minutos.
Unas y otros buscamos momentos que, resulten agradables, divertidos, sensuales.
Un error es por parte de ambos, imaginar que para nosotras sólo es un “que pasen los minutos, para poder salir de aquí con la pasta” y para ellos un “yo vengo a pasarlo bien y me importa un bledo si ella disfruta”.
Éste es un juego de dos. Si uno falla, se va todo al traste.
Nosotras porque, lógicamente, deseamos pasarlo bien. Los recuerdos perduran, mucho mejor si son buenos.
Vosotros porque, buscáis un encuentro especial y resulta mucho más agradable buscar el buen rollito, y sacar el mayor provecho del tiempo compartido. Y si el recuerdo es bueno, se le saca mucho más jugo…(no sonrías, es justo lo que pretendo).
Una actitud positiva frente al sexo, te hace más guapo, más sexy, más encantador, más agradable. No lo olvidéis. Somos humanos, pero antes que nada somos animales.
Racionales, eso dicen, pero animales. El sexo es un instinto.
Sonríe y…¡hazlo!.
Y vosotros…¿os reís?
Paula
